Transcurría el año 1440 d.C. y el conde Hans von Oettingen
se proponía atacar por sorpresa a la ciudad libre de Nördlingen
que en ese entonces era muy segura.
Para ello había sobornado a los serenos de la puerta de Löpsingen
, quienes no echarían el cerrojo durante toda la noche. Cuando la
mujer del tejedor Dauser fue a buscar cerveza para su marido vio un cerdo
que se dirigía hacia esta puerta. Fue allí que la puerta
se abrió y el cerdo desapareció a través de la hendedura ya
que por aquellos tiempos crecían hierbas
frescas comó ortigas 6 o "Pfaffenhütchen" afuera de los accesos
a la ciudad. La mujer del tejedor gritó entonces "So G´sell
So" y quizo hacer entrar al cerdo.
Esto despertó a los vecinos quíenos vieron que la puerta
estaba abierta y dieron señal de alarma. El cerrojo se pudo echar
a tiempo y el conde tuvo que volverse con sus tropas. Esta es la historia
de cómo un cerdo salvó a Nördlingen de su enemigo.
En recuerdo a este episodio grita el sereno del campanario todas las
noches
"So G'sell so!"